Aspectos a tener en cuenta sobre la pintura para exteriores
Más allá del aspecto estético, mantener en un buen estado la fachada de una vivienda es esencial para garantizar la protección del inmueble y evitar daños mayores. Aunque no existe un periodo de tiempo exacto, los expertos recomiendan revisar su estado y darle una mano de pintura cada 5 años. La pintura para exteriores juega un papel esencial en todo este proceso, pues además de renovar el aspecto de la fachada, estos productos poseen propiedades que ayudarán a conservar la fachada en buenas condiciones durante más tiempo.
Qué propiedades debe reunir una pintura para exteriores
Al igual que a una pintura para interiores se le exigen ciertas características como una buena lavabilidad o cubrición, la pintura para exteriores también debe reunir una serie de particularidades como las siguientes:
- Propiedades antimoho y antihumedad:dado que las fachadas están constantemente expuestas a las inclemencias meteorológicas, a los productos destinados a su mantenimiento se les exige que tengan propiedades protectoras frente a los problemas de humedad y moho, sobre todo en aquellas zonas con altos niveles de humedad.
- Impermeabilidad: ligeramente relacionado con el punto anterior, a las pinturas para fachadas también se les exige que sean impermeables y eviten las filtraciones de agua en el interior del edificio. Esto es especialmente importante en áreas geográficas en las que el clima es habitualmente lluvioso.
- Transpirabilidad al vapor de agua:pintura para fachadas debe dejar pasar la humedad a través de sus poros para evitar que esta se acumule sobre las superficie y provoque manchas de humedad.
- Protección frente a los rayos solares:la continua exposición al sol provoca que la pintura se degrade y vaya perdiendo su color poco a poco. En la actualidad existen pinturas para exteriores formuladas tecnología de protección solar que, además de mantener el color de la fachada en buen estado durante más tiempo, también contribuyen a reducir la acumulación de calor en las fachadas.
- Buena adherencia:un aspecto esencial en cualquier pintura es la adherencia que presenta sobre las superficies, y este factor es realmente importante en la pintura para fachadas, ya que estas pueden presentar problemas como desniveles o desconchados que dificultan la adherencia. Aunque estas patologías deben corregirse antes de pintar, es conveniente que la pintura tenga una buena adherencia para garantizar unos buenos resultados en el pintado.